Ignacio mas acá o mas allá de la belleza en si de tu poema en el residen varios conceptos que son esenciales al momento de plantearse verdaderamente el tema de la vivienda social.
Es que la cuestión está tan lejos de un científico punto de vista basado en coeficientes K , calefones solares....techos verdes ..etc
Creo que en tu escrito sentás muy claramente las bases de una legítima arquitectura sustentable fundada en lo vital.
Me vino a la memoria el tema de la Celeste Carballo
Es la vida que me alcanza…..
Sin duda eso nos hace falta
Que la vida nos alcance
que los usuarios se conviertan en habitantes
que olvidemos la pureza estéril de los higienistas racio
que nos atrevamos a imaginar
una arquitectura concebida y construida con nuestras manos
y con las manos de nuestros hermanos.
Tal vez las bases esenciales
de una arquitectura sustentable
en términos de legitimidad social
se concreten simplemente atreviéndonos
a un apretón de manos
que reestablezca el vínculo quebrado
y si ……………………………………
los ideales son irrompibles
los hombres no
Es esta debilidad humana la que expresa en toda su magnitud
la fortaleza y dificultad de la búsqueda .
Misteriosamente en esa tensión
se cimenta
La fecundidad de la idea .
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Dejemos que la vida nos alcance
Esta reflexión tuya Ignacio, en términos poéticos me alcanza para augurarte el mejor de los caminos profesionales por..venir.
Ahora me pregunto.... tendrá algo que ver en tu valoración de las manos tu apellido De Palma
Salud
Marcelo
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1 comment:
Marcelo, honestamente te quiero agradecer este espacio y esta reflexión. Estoy atravesando un momento de mi vida un tanto triste y apagado, con varios problemas que seguramente muchos pasaron pero que aun asi me tienen a mal traer y con los animos bajos. Leer estas cosas, viniendo de alguien como vos que yo se bien su pasión, se reconoce a kilometros de distancia, admira y destaca lo valioso de las palabras y el sentido que un gesto tan simple como la tierra y el agua pueden conectar en las fibras mas interiores. Confio en que algún día todos podamos hablar con palabras sinceras y con reales intenciones más allá del sometimiento de las rutinas y las exigencias insanas. Confío en que existen todavía algunos pocos que luchan por entender lo que va oculto en las miradas y jugarse el futuro en lo que se ama. Sea palabra, sea arquitectura, sea arte, familia, profesion, cultura, todo lo que nos dicta el alma. Un abrazo grande. Nacho.
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