Bien argentinos
Berto González Montaner. Editor jefe ARQ
bmontaner@clarin.com El pasado lunes 21 tuvimos fiesta.
Entregamos los premios Clarín-SCA para estudiantes de arquitectura de todo el país.
En el auditorio de la Sociedad Central de Arquitectos hubo padres que explotaban de orgullo, estudiantes exultantes producidos para la foto de la tapa de ARQ. Y la asesora, los jurados y los organizadores más que satisfechos por los resultados.
El éxito de un concurso depende en buena parte de la labor de los asesores que realizan las bases y del jurado, lógicamente además del nivel de los trabajos presentados.
En esta novena edición, el jurado hizo una tarea ejemplar.
La selección de trabajos que realizaron tiene la sintonía justa.
Las propuestas que hoy presentamos y que iremos publicando próximamente tienen la virtud, más que en otros años, de ser proyectos realmente argentinos. Ajustados programáticamente a la escala, las necesidades, las tecnologías y los recursos argentinos. Y resueltos con talento, haciendo foco en resolver nuestros problemas reales y no los que nos proponían hasta hace muy poco desde las usinas globalizadas de la disciplina.
Los tres primeros premios abarcan el tema de la vivienda para sectores medios y medios bajos, con soluciones para localizaciones tan dispares como Misiones, el Tigre o la Boca.
Entre las menciones hay bibliotecas públicas, polideportivos y hasta un umbráculo para un potrero en una localidad indígena en las afueras de Rosario.
Parafraseando a Jonathan Glancey en su balance sobre esta última década, podemos decir que estos proyectos modestos "son un testimonio de las maravillas que puede producir la imaginación, en lugar de la profundidad de los bolsillos". ¡Felicitaciones a los participantes, a los profesores! ¡Y a los jurados! .
Debajo de la Editorial, un croquis del proceso del proyecto de Verónica Pujol.
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